Oh, mi Jesús, ¿Por qué se dice que el apostolado
dispersa y debilita el alma?… ¿Hay, pues, apóstoles que no lo son, únicamente,
de Tu Corazón?... ¿El agua de la fuente es menos pura porque ella serpentea y fecunda
la Pradera?... Yo no quiero poner más amor en mi oración que en mi
vida, porque no hay nada más que una oración de AMOR…
Dulzura de palabras y un gran mensaje.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Boa noite, querida Maria!
ResponderEliminarPassar por aqui é ter um terno e dulcíssimo momento de paz interior e saborear do Amor imenso de Deus!
Obrigada amiga.
Seja muito feliz e abençoada junto aos seus amados!
Bjm carinhoso e fraternal de paz e bem
Gracias, por esta reflexión, muchas, gracias, a mi también me cuesta entrar en su blog y no se porque, bueno, un fuerte abrazo.
ResponderEliminarQué hermosas las imágenes que acompañan hoy la oración, Marian, un abrazo!
ResponderEliminarP.D. Por algunos días tuve problemas para comentar, tuve que actualizar mi perfil, cosas de los bloggers!
creo que es primordial centrarse en cultivar a diario la unión de amor con el Señor, en la oración, que de allí surgirán de forma natural los apostolados y testimonios que el Señor desee.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, querida Marian