lunes, 8 de enero de 2018

¡SALVAR LAS ALMAS!



Fue en la catedral de S. Pedro. Un domingo, al finalizar la Misa en la que Teresa había recibido la Eucaristía, cuando cerraba el misal, se conmovió profundamente al ver una imagen de Jesús en la Cruz que se deslizaba de una de sus páginas


«Sentí un gran dolor al pensar que aquella sangre caía al suelo sin que nadie se apresurase a recogerla. Tomé la resolución de estar siempre, con el espíritu, al pie de la Cruz para recibir el rocío Divino que goteaba de ella, y comprendí que luego debería derramarlo en las almas… También resonaba continuamente en mi corazón el grito de Jesús en la Cruz: «¡Tengo sed!». Estas palabras encendían en mí un ardor desconocido y muy vivo… Quería dar de beber a mi Amado y yo misma me sentía devorada por la sed de almas… No eran todavía las almas de los sacerdotes las que me atraían, sino las de los grandes pecadores; ardía en deseos de arrancarlos del fuego eterno…»


                                        (Manuscrito A ,45 v°)


                                                                  


                                                                     




                                                                     

13 comentarios:

  1. ¡Nuestra inigualable Teresita! Nuestra gran maestra y tierna amiga.

    Ella nos ayude a ser otras pequeñitas salva-almas e interceda por nosotros.

    Dios te bendiga querida amiga. Un fuerte abrazo.

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  2. Qué hermosa la nueva imagen de la Madre con el Niño! Un alma pura y misericordiosa la de Teresa, un abrazo Marian!

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  3. Realmente conmovedor.

    Muchas gracias.

    Un fuerte abrazo.

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  4. "La salvación de muchos depende de la oración de pocos"

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  5. Maravillosa, Santa Teresita. Gracias por tu compartir, querida Marian.
    Perdona mis ausencias.
    Te ruego oraciones por una persona que anda padeciendo mucho en su interior. Muchas gracias, Marian.
    Esta persona me es muy allegada y aún no se ha convertido.
    El demonio la acecha con la desesperación, el enfado con Dios y el auto-desprecio...
    Un abrazo, querida

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  6. Deseo ardientemente tener la misma sed de Teresita. Cristo me la conceda, especialmente por aquellos menos agraciados.

    Gracias Marian. Unidas en oración hermana.

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  7. Si ya la deseas hermana, es que ya Dios te la ha concedido. El deseo ya es realidad.¡Dios sea Bendito y consolado!

    Un fuerte abrazo, María.Dios te bendiga.

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  8. Felicitas amiga y hermana en Cristo. Cuenta con mi oración y ofrecimiento, desde este momento.Por desgracia hay muchas personas con el mismo problema. Unidas en la oración.

    Un fuere abrazo.

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  9. Muchas, gracias por sus palabra en mi blog, enriquecen y ayudan mucho, que Dios la bendiga siempre un saludo fraterno.

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  10. Enhorabuena por esta reflexión la imagen es muy impresionante Saludos Mirian

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  11. Esplendido mensaje.
    La sed es la carícia del Servicio eterno.


    Un abrazo.

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  12. Muy buenas noches querida Marian; Como siempre te digo,
    llegar a tu bella página es el bálsamo que da vida a mis
    sentidos.
    Que Dios te pague tu labor...
    Santa Teresita, fue un ejemplo para toda la humanidad.
    Que ella nos tienda la mano, para ayudarnos en nuestro caminar.
    Mi agradecimiento y cariño con un fuerte abrazo.
    ¡¡¡QUE DIOS TE GUÍE Y BENDIGA!!!.

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